La inteligencia artificial está generando una nueva y dramática necesidad de electricidad, y aunque los ejecutivos tecnológicos han estado promocionando desde hace mucho tiempo su compromiso con un futuro de energía verde, la urgencia de esa necesidad les presenta un camino difícil hacia adelante.
Las preguntas sobre cómo alimentar el auge de la inteligencia artificial tomaron el centro del escenario a principios de este mes en la CERAWeek de S&P Global, informó The Wall Street Journal. La conferencia anual de energía atrae a miles de ejecutivos a Houston para discutir temas que van desde la geopolítica hasta la transición energética.
Nadie sabe cuánta electricidad se necesitará para impulsar el auge de la inteligencia artificial. La IA requiere una potencia informática masiva y cargas de energía, lo que ha provocado una explosión de centros de datos. El cofundador de Microsoft, Bill Gates, dijo en la conferencia que la cantidad de energía que la IA está destinada a consumir es asombrosa.
«Uno piensa, ‘Dios mío, esto va a ser increíble,'», dijo reportadamente Gates. ChatGPT solo utiliza más de 17,000 veces más electricidad que el hogar promedio en Estados Unidos diariamente.
La preocupación entre los ejecutivos tecnológicos es que las demandas energéticas de la IA superarán las capacidades de las fuentes limpias. La energía eólica y solar no son confiables porque están sujetas a cambios en el clima. Mientras que las instalaciones nucleares tardan años en construirse, por lo que no son una opción viable cuando las empresas necesitan energía de inmediato.
«La tecnología no va a esperar 7 a 10 años para construir esta infraestructura,» dijo Toby Rice, CEO del productor de gas natural EQT, en una entrevista con el Journal. «Eso te deja con el gas natural.» En la conferencia, Rice dijo que le preguntaban repetidamente dos preguntas: «¿Qué tan rápido pueden moverse ustedes? ¿Cuánto gas podemos obtener?»
El problema es aún más apremiante dadas las metas de la administración Biden para reducir las emisiones de carbono, un subproducto de la quema de carbón y gas natural que agravan la crisis climática. En abril pasado, Biden estableció un ambicioso objetivo para que el sector energético sea carbono-neutral para 2035 y que la economía de EE. UU. sea neutra en carbono para 2050.
Algunos ejecutivos afirmaron que el crecimiento dramático de la IA no obstaculizará la transición hacia la energía limpia. «Vamos a ser neutrales en carbono para 2050. Seguimos creyendo absolutamente eso,» dijo Robert Blue, CEO de Dominion Energy, según informó el Journal. «Pero el crecimiento en la demanda hace que eso sea más complicado.»
Blue dijo que su empresa está construyendo al menos una nueva planta de gas natural para satisfacer la demanda de los centros de datos.
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