La disputa comercial entre Estados Unidos y China ha alcanzado un nuevo nivel, hasta el punto de que se ha prohibido el uso de procesadores de AMD e Intel en los ordenadores gubernamentales. Evidentemente, estos chips serán reemplazados por soluciones locales. El motivo detrás de esta determinación es la intención de disponer de sistemas «seguros y confiables», es decir, que China teme que el uso de estas CPU pueda ocasionar futuros problemas de privacidad.

Según reveló el Financial Times (vía Wccftech), el gobierno chino no solo ha vetado el uso de chips de AMD e Intel en sus sistemas para garantizar la privacidad. También ha aconsejado a las autoridades a abandonar el uso del sistema operativo de Microsoft, Windows, como su sistema operativo principal. En este caso, el cambio es mucho más simple, ya que pueden optar por cualquier distribución de Linux.

China prohíbe el uso de unidades de procesamiento AMD e Intel en computadoras gubernamentales por motivos de privacidad

Informes indican que el bloqueo se llevó a cabo después de que el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información de China publicara una lista de CPU que cumplan con las políticas gubernamentales. Aunque no se ha revelado ningún nombre, es claro que las empresas locales no faltarán en esa lista. Entre las compañías estarán, sin duda alguna, Huawei, Loongson, Phytium y Zhaoxin.

En el caso de las computadoras de uso gubernamental, cualquiera de estos fabricantes ofrece procesadores más que suficientes para cubrir sus necesidades. Es comprensible que en otros sectores continúen utilizando tecnología occidental. Todavía es pronto para hablar de una total independencia tecnológica en todos los aspectos. Y menos aún en el ámbito de las GPU e IA, donde el hardware chino aún está considerablemente rezagado frente a sus competidores. Huawei ha mostrado estar a la par de la industria en el sector de las
CPU, y cuenta con el respaldo de SMIC para fabricar chips a 5 nm.

Ambas empresas sufrirán las consecuencias si la hostilidad hacia China sigue aumentando

AMD e Intel serán los principales afectados. No solo porque el gobierno chino dejará de utilizar sus componentes en fines gubernamentales. De hecho, se prevé que la situación evolucione hasta el punto en que EE.UU. les prohíba seguir comercializando sus procesadores en China. Microsoft también debe estar en alerta. Según StatCounter, en febrero de 2024, el 75,36% de todos los ordenadores de
China utilizan un sistema operativo Windows.

En 2023, el 27% de los ingresos de Intel provinieron de
China. Estas restricciones están impulsando a que empresas locales como Huawei o Loongson no solo aumenten su participación en el mercado, sino que aceleren el progreso de sus propias CPUs. Cuando estas sean lo suficientemente competitivas, el siguiente paso será contemplar que AMD e Intel enfrentarán una dura competencia con una
mayor adopción de hardware nacional.

Tanto China como Estados Unidos están invirtiendo grandes sumas en su arsenal tecnológico. Estados Unidos se está enfocando en Intel, TSMC o Samsung. China está apostando por
SMIC, la fundición más avanzada del país. Pero no descuida las inversiones en otras fundiciones más pequeñas. Esto favorece el aumento de la producción en masa de procesos más consolidados. Además de invertir en I+D para crear nueva maquinaria y tecnologías litográficas.