Angela Chao, la magnate del transporte marítimo que se ahogó después de chocar su Tesla en un estanque en su rancho de Texas, tenía un nivel de alcohol en sangre casi tres veces superior al límite legal cuando murió, muestran los registros policiales recién publicados.
La repentina muerte de Chao, quien era la CEO de Foremost Group, la esposa del capitalista de riesgo Jim Breyer y cuñada del ex líder republicano del Senado Mitch McConnell, no se hizo noticia nacional hasta semanas después de que ocurriera en el condado de Blanco, fuera de Austin. La policía local inicialmente se negó a compartir muchos detalles, diciendo que aún estaban investigando.
El miércoles, el sheriff del condado de Blanco publicó 62 páginas de registros. Los documentos dijeron que la muerte de Chao fue un «accidente desafortunado». También dijo que la concentración de alcohol en su sangre era de 0.233 gramos por 100 mililitros, que es aproximadamente tres veces el límite legal de 0.08 gramos por 100 mililitros.
Chao planeaba conducir de un edificio en el rancho a otro porque hacía frío afuera. Pero accidentalmente retrocedió hacia un estanque poco después de subirse a su auto, dijo la policía.
El informe describe cómo los amigos de Chao, un empleado y los primeros en responder intentaron salvarla del estanque en el que había ingresado en el remoto rancho. A pesar de que una de las puertas traseras del auto estaba abierta, los oficiales no pudieron sacarla de ella, y les llevó varios minutos romper la ventana del lado del conductor y extraer su cuerpo.
Chao llamó a una amiga desde el vehículo sumergido y le dijo que la amaba y que no podía abrir su puerta, según el informe policial. Según The Wall Street Journal, que informó anteriormente detalles sobre la muerte de Chao, Chao también dijo que había puesto accidentalmente el vehículo en reversa antes.
Business Insider informó anteriormente que varios propietarios de Tesla habían informado a las autoridades federales sobre confusión y situaciones peligrosas que atribuyeron a los mecanismos de cambio de marchas no convencionales de sus vehículos.
El Journal informó que la familia de Chao no culpó a Tesla por su muerte.
«El fallecimiento de Angela fue una terrible tragedia, y las palabras no pueden describir la profunda pena de la familia», dijo un portavoz de la familia de James S.C. Chao, padre de Angela, en un comunicado por correo electrónico. «La familia está agradecida a los primeros en responder y amigos que lo intentaron tanto para salvarla.»
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