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El pasado viernes 8 de marzo se conmemoró y reivindicó el Día de la Mujer. Una fecha que sirve como altavoz de la lucha por los derechos de las mujeres, una lucha que se libra todos los días del año. Precisamente sobre ese concepto se construye este artículo, sobre la idea de la constancia y la concienciación real.
Y es que, cuando el compromiso no es persistente y sincero no es compromiso es oportunismo. En el marco de reivindicaciones como la del 8 de marzo, muchas marcas lanzan consignas que fingen ser feministas o directamente se aprovechan de la ocasión para autopromocionarse «festejando». Así que, al igual que hicimos el año pasado, hemos recabado una serie de campañas para analizarlas y diferenciar entre compromiso y purple washing.
Campañas mal ejecutadas
Bershka
La marca de moda joven y urbana se queda en este lado del listado no porque el mensaje de su campaña esté mal en sí mismo, sino porque han optado por el camino corto y fácil, una vía que no transmite, ni reivindica, ni aporta nada realmente.
Bershka se ha limitado a publicar un reel en el que repasan conceptos de apoyo y sororidad, pero nada más. Si a esta acción la acompañasen con otras que sí tuviesen un aporte real a la lucha feminista, podría situarse en la sección de campañas bien ejecutadas, pero en este caso se nos queda como purplewashing. Una forma de pretender sumarse a este día, pero sin mojarse.
My Sugar Daddy (My Sugar Mommy)
La plataforma web de «sugar dating», My Sugar Daddy, decidió que era una gran idea celebrar el Día de la Mujer lanzando su nuevo servicio My Sugar Mommy. La página dedicada a conectar a mujeres jóvenes con señores mayores adinerados, ahora quiere hacer lo mismo pero al revés. Y así lo han anunciado en una lona gigante colgada en Madrid, en la esquina entre calle del Carmen y Preciados.
Así mismo, a través de un comunicado, la plataforma reflexionaba «¿es el máximo exponente del empoderamiento femenino que una mujer madura pueda salir y «apadrinar» a chicos jóvenes?«. Bueno, pues la respuesta es bastante clara: no, por supuesto que no. Construir relaciones basadas en la desigualdad de poder y en dinámicas de dependencia, en este caso siendo de índole económica, ni es empoderante ni es sano.
My Sugar Daddy expone su nuevo servicio como «una forma más moderna de entender y vivir el (nuevo) empoderamiento femenino«, pero lo que nos presentan no es empoderamiento. Las problemáticas, discriminaciones y obstáculos que enfrentamos las mujeres distan mucho de las «soluciones» que marcas como esta plantean y que se aprovechan de una fecha destacada para hacerse publicidad a sí mismas sin haber pensando ni un segundo en qué representa el 8M y por qué luchamos las mujeres.
Las mujeres hemos peleado por tener derechos y libertades, y la independencia económica tiene un papel muy relevante en esto, por lo que endulzar el ideal de contar con un hombre mayor que nos mantenga simplemente por ser jóvenes y atractivas para él a cambio de «compañía» o todo hacia lo que pueda escalar esa relación de dependencia, nada tiene que ver con el feminismo. Y darle la vuelta a la tortilla diciéndonos que ahora nosotras también podemos desempeñar ese papel, tampoco es feminismo.
Pornhub
Podríamos hablar del clásico «me pinto el logo de morado y listo», pero el caso de Pornhub va mucho más allá en cuanto a hipocresía se refiere. Que una página de contenido pornográfico que aloja vídeos en los que se denigra, veja, maltrata, abusa, agrade, viola, etc. a mujeres es el sumun del cinismo.
Dejando a un lado el hecho demostrado de que la pornografía ayuda a moldear conductas sexuales agresivas e insanas en las que tanto el consentimiento como el disfrute femenino se desdibujan y olvidan totalmente, Pornhub se trata de una web que acumula denuncias por alojar contenido subido sin el consentimiento de todas las partes implicadas en el vídeo, así como de contenido que muestra abusos, violaciones e incluso pedofilia. Una plataforma que provoca perjuicios de tales magnitudes a mujeres no engaña a nadie por mucho que se pinte de morado en un acto vago, vacuo e indignante.
Real Sporting
Nos encontramos en un momento de impulso para el fútbol femenino, en el que gracias a la labor de las futbolistas y a su lucha han avanzado en derechos laborales y visibilización, pero todavía queda mucho camino. Y esta realidad queda más que reflejada al ver el vídeo que el Real Sporting ha creado con motivo del Día de la Mujer.
Podrían haber mostrado el trabajo y esfuerzo de sus jugadoras femeninas, podrían haber recopilado testimonios de estas, podrían haber repasado sus éxitos e historia, podrían haber desarrollado iniciativas de apoyo a la mujer en el deporte, podrían haber organizado charlas. En definitiva, haberles dado voz, protagonismo y organizar acciones coherentes y valiosas. En cambio han hecho esto:
???? Un símbolo que nos une generación tras generación.#8M#RealSporting pic.twitter.com/7xA3mLsJtb
— Real Sporting (@RealSporting) March 8, 2024
Mostrar a una niña limpiando y pintando un campo de fútbol para acabar creando el símbolo de Venus, transmite más cosas negativas que positivas. Además de demostrar una absoluta falta de intención y comprensión hacia esta fecha y la lucha que hay detrás. Realmente creo que la pieza en sí es muy reveladora, las mujeres debemos trabajar solas para perseguir la igualdad. Pero dudo mucho que el Real Sporting tuviese esa idea en mente al plantear, guionizar, grabar, montar y publicar el vídeo.
Campañas bien ejecutadas
Filmin
¿Qué son exactamente las cosas de chicas? A este desfasado concepto ha querido enfrentarse la plataforma de streaming española a través de una campaña cuidada e inteligente en la que se denuncia esa mentalidad obsoleta que menosprecia el contenido creado por mujeres simplemente por eso, por haber sido ideado, desarrollado y ejecutado por una mujer.
Para ello han creado una pieza de vídeo en la que se repasan estereotipos, realidades y barreras que, efectivamente, son «cosas de chicas» ya que nos afectan negativamente a las mujeres por el mero hecho de serlo. Como el que se catalogue a todas las películas a cargo de mujeres como iguales, que estas cuenten con un 40% menos de presupuesto que las de los hombres, que las mujeres del mundo audiovisual pasen a ser invisibles a partir de los 50, o que sean invisibles directamente en las reuniones de proyectos.
Pero, a mitad del vídeo se produce un punto de inflexión, en el que se pasa a repasar cuáles son las «otras cosas de chicas». Haciendo hincapié en conceptos como la sororidad, la colaboración, el impulsarnos las unas a las otras y el luchar contra el machismo. Un cierre que destaca la importancia de tejer una red fuerte de apoyo entre nosotras para seguir avanzando y conquistando espacios.
Para crear el vídeo, Filmin ha contado con la colaboración de varias profesionales del mundo audiovisual que han prestado su voz: Bàrbara Farré (directora y directora de fotografía), Lucía G. Romero (guionista y directora), Gala Hernández (cineasta), Isabel Herguera (artista visual, directora y productora de animación), Laura Hojman (guionista, productora y directora), Marta Lallana (guionista y cineasta), Elena López Riera (cineasta), Laura Pedro (artista de efectos visuales), Carlota Pereda (directora), Raphaëlle Pérez (actriz), Celia Rico (guionista y directora), Carla Simón (guionista y directora), Carla Subirana (guionista y directora), Estibaliz Urresola (guionista y directora) y Mireia Vilapuig (actriz).
Lego
La marca de juegos de bloques de construcción ha presentado un interesante estudio en el que abordan la problemática de poner una presión excesiva sobre las mujeres desde la infancia. Este se llevó a cabo en 36 países, tomando datos de más de 61.500 niños y niñas de entre 5 y 12 años.
Lego destaca como el lenguaje con sesgos de género y las exigencias de perfección inhiben el potencial creativo de las niñas, y arroja datos tan reveladores como que dos tercios de las niñas son reacias a compartir sus ideas porque temen cometer errores. Así mismo, 3 de cada 5 sienten la presión social de lograr resultados perfectos en lo que hacen, y 8 de cada 10 sentiría menos miedo de probar cosas nuevas si supiesen que sus errores serían vistos como oportunidades de aprendizaje.
Lego ha presentado el estudio y sus conclusiones a través de la campaña «More than perfect», la cual incluye la anterior pieza de vídeo y otras versiones adaptadas a redes sociales.
Sumado a esto, también se ha elaborado una guía para padres y madres titulada «10 pasos para fomentar la confianza creativa», en colaboración con Jennifer B. Wallace, investigadora de Harvard. La cual aporta posibles soluciones con las que ayudar a que las niñas crezcan desarrollando confianza y abrazando su creatividad.
Lo principal es el lenguaje, ya que la forma en que se tratan los logros de las niñas y los de los niños son diferentes. Según el estudio, hay siete veces más probabilidades de calificar los éxitos de las niñas como «lindos», «dulces», «bonitos» o «hermosos», mientras que hay el doble de probabilidad de determinar los logros de los niños como «valientes», «fantásticos», «geniales» o «innovadores».
El vocabulario comunica y reducir los resultados de las niñas a adjetivos que expresen belleza o delicadeza, pero no audacia o creatividad acaba calando. Lego propone usar elogios edificantes y relativos al desarrollo como «imaginativo», «valiente» o «inspirador».
Una acción compromet
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